Tras unas semanas de retiro, tiempo que he aprovechado para seguir los 14 pasos para ser un buen troll, Aegon regresa a la acción con esta feliz ¿coincidencia? que he hallado esta mañana cuando hacía una pasada rutinaria por los medios serios.
Resulta que el juego preferido de este blog, el LA Noire, también se ha apuntado a esa moda de sacarnos los cuartos con DLC y, por lo visto, hace poco los responsables del juego han publicado un nuevo caso disponible para todos los mortales que dispongan de la módica cantidad de 4 euros. Oh wait, 3,99, que no es lo mismo...
Tras esta aterradora experiencia, en la que han tratado de lavarme el cerebro de forma cruel y vil, decidí pasarme por
Hardgame2 (muy a mi pesar eso sí) para descubrir el
siguiente párrafo:
Sin embargo, cuando creía que lo peor ya había pasado, me encuentro con que en Meristation le habían dedicado un
artículo a todo el DLC, en el que ensalzaban las virtudes del mismo y el insignificante precio que tendremos que pagar por adquirirlo.
Todo esto me lleva a concluir que LA Noire tiene el dudoso placer de representar todo lo malo de esta generación: trabajadores explotados por los dirigentes del estudio, hype por las nubes que no llega a cumplir, campaña de marketing agresiva que hace que el juego se venda como churros y DLC que podría haber estado incluido en el juego o que no aporta nada a precio de oro. Por supuesto, prácticas como los nueves y los dieces inmerecidos y las críticas a aquellos que no se bajaron los pantalones van incluidas en el marketing, y esto no parece ser más que otro capítulo más de una historia que no parece tener fin.
Yo creo que todo esto es tan coincidente como la nueva campaña publicitaria de
Pepsi, ahí queda eso.
Insultos, ruegos, preguntas y lecciones morales abajo.
